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Las ventajas de la economía circular son evidentes: el reciclaje protege el medio ambiente y ahorra recursos. Sin embargo, el sistema solo puede desplegar todo su potencial si las empresas de reciclaje operan de manera rentable.

Reciclado: así se llama el material clave de la industria del reciclaje. Pero, ¿qué se esconde realmente detrás de este término? Es un concepto general que se refiere a los materiales que surgen en el proceso de reciclaje. Los reciclados vienen en diversas formas, como triturado, regranulado o regenerado. El triturado se obtiene al moler plástico. Se habla de regranulado cuando del triturado se obtiene granulado mediante un proceso de fusión. El regenerado también se produce a través de un proceso de fusión, pero se le añaden aditivos para mejorar las propiedades del material. A diferencia del triturado, el regenerado y el regranulado tienen un tamaño de grano uniforme y no contienen polvo.

¿Cómo se produce el reciclado?

Los materiales para el reciclaje se encuentran en muchos objetos que otros desechan, como botellas, cajas o vasos de plástico. Las empresas de reciclaje procesan estos residuos mediante un procedimiento cuidadosamente ajustado. El reciclado resultante se mezcla con materias primas para nuevos productos, o bien, los nuevos productos se fabrican exclusivamente con reciclado. Estos pueden ser envases, pero también textiles o muebles.

La calidad del reciclado es crucial

Para estos productos de alta calidad se necesita un reciclado de calidad especial, que también permite alcanzar precios más altos. Para obtener la mayor cantidad posible de plástico de alta calidad, las empresas de reciclaje primero requieren una gran cantidad de material reciclable. Para conseguirlo, son necesarios sistemas de recolección eficientes como el "Contenedor Amarillo". Según el asociación Plasticseurope, más de ocho millones de toneladas de plásticos usados se recolectaron de esta manera en Europa en 2016.

Residuos plásticos: La cantidad importa

Cuanto mayor sea la cantidad de plástico recolectado, mayor será la proporción de material que se puede transformar en productos de alta calidad. Para el reciclador, también es crucial que, además de la cantidad, se ajusten el tipo, la composición y la calidad del material.

Potencial de mejora en el reciclaje

La cantidad de plástico reciclado disponible en Europa podría ser mayor. Solo un tercio del plástico consumido en el continente se recicla. El resto termina en vertederos o se incinera. 

Además, los residuos plásticos recolectados a menudo no están compuestos como se esperaba. Se encuentran desechos domésticos e incluso piezas de metal. Según una investigación del portal en línea Plastverarbeiter, el porcentaje permitido de impurezas se superó en el 80% de las muestras. Aunque la tecnología adecuada puede separar todo lo que no se puede reciclar, esto implica un mayor esfuerzo. Además, los residuos deben ser eliminados, lo que representa un costo adicional para los recicladores. 

La composición y el tipo de embalaje son cruciales

El tipo de envases desechados también puede complicar el reciclaje. Por ejemplo, las botellas negras requieren más esfuerzo para ser clasificadas en comparación con las transparentes. Además, sus restos son difíciles de reutilizar, ya que los fabricantes prefieren granulado transparente para crear una gama más amplia de productos.

La composición de los envases también es crucial. Los cartones de bebidas hechos de materiales compuestos aumentan la complejidad del reciclaje. A veces están formados por uniones fuertemente adheridas de varios tipos de plásticos, algunas capas son de papel e incluso se encuentran rellenos como la tiza.

Reciclaje: también una cuestión de rentabilidad

Cuando los fabricantes deciden si usar reciclado o plástico nuevo hecho de petróleo, además de la calidad, también consideran los costos. Por eso, los recicladores dependen de tecnología moderna, ya que deben producir el reciclado de manera rentable para ofrecerlo a precios competitivos. En términos de calidad y precio, el reciclado debe compararse con el material nuevo.

La rentabilidad del reciclado depende de varias variables. Primero, el material entrante debe ser de la mayor calidad posible. Cuanto mejor sea, más económico será el proceso de clasificación. Esto significa menores costos de proceso, lo que a su vez aumenta la rentabilidad.

El proceso de reciclaje se lleva a cabo en varias etapas: primero, una trituradora descompone los residuos, luego una fuerte corriente de aire elimina todo lo innecesario, como películas, poliestireno o restos textiles. El plástico restante se muele, se lava, se separa por densidad, y finalmente se seca y se funde.

Solo si el reciclador tiene claro desde el principio cuán rápido debe procesar ciertas cantidades, puede planificar sus instalaciones de manera óptima y calcular qué módulos necesita para clasificar, lavar, triturar o decidir si una planta de extrusión es adecuada. Todos los módulos deben estar coordinados para que se produzca un reciclado de buena calidad, que sea competitivo, y para que todo el proceso de producción siga siendo rentable.

Tecnología de procesos flexible en reciclaje

En teoría, el reciclador siempre tendría a su disposición una cantidad estable de material de entrada de calidad uniforme. Si esto fuera así en la práctica, podría invertir en el parque de maquinaria adecuado y operar a plena capacidad. Sin embargo, en la realidad, el tipo y la cantidad de plástico reciclado recibido varían considerablemente. Por ello, es crucial que las empresas equipen sus instalaciones con tecnología flexible. Deben ser capaces de identificar diversos materiales e impurezas, tanto en los diseños actuales como en los futuros de envases y productos plásticos.

Además, los procesos de clasificación deben ser flexibles y adaptarse a las fluctuaciones en la calidad y cantidad del material entrante. Mediante una disposición y combinación estratégica de los sistemas de clasificación, es posible aumentar tanto la calidad como la cantidad de producción del plástico correspondiente, mejorando así la rentabilidad.

Mayor tasa de reciclaje gracias a tecnología inteligente

Para aumentar la tasa de reciclaje y hacer el procesamiento más rentable, la industria depende de la innovación. Según el bvse-Fachverband Kunststoffrecycling, solo el 12,3 por ciento de los nuevos productos plásticos se fabrica con material reciclado. La razón de esta reticencia no es la falta de voluntad de los fabricantes, sino la incertidumbre. A menudo saben muy poco sobre los reciclados y los plásticos que contienen. Los materiales se funden a diferentes temperaturas y algunos tienen distinta resistencia. Por eso, muchos fabricantes siguen utilizando materias primas tradicionales derivadas del petróleo, a pesar de la creciente presión de clientes y el público para usar más reciclado.  

Con tecnología inteligente, este problema podría resolverse pronto. Es posible imaginar sensores que analicen la calidad de los plásticos procesados directamente en la producción. Un software podría evaluar los datos y ponerlos a disposición de la industria en una plataforma digital.

Más reciclaje, menos residuos – el medio ambiente también se beneficia

Indirectamente, los deseos de los consumidores también influyen en las decisiones de los recicladores. Los consumidores son cada vez más conscientes del medio ambiente y exigen productos con un alto contenido de material reciclado. Esta tendencia podría aumentar la demanda de reciclados, lo que a su vez llevaría a precios más altos y, por ende, a una mayor rentabilidad.

Sin embargo, un reciclaje bien planificado no solo beneficia a las empresas. También es beneficioso para el medio ambiente. No solo porque los desechos plásticos contaminan paisajes y océanos en todo el mundo. La producción y quema de plástico también genera CO2, un gas de efecto invernadero que contribuye al calentamiento global. Por lo tanto, el reciclaje de plásticos en una economía circular no solo favorece a la industria del reciclaje y a los consumidores, sino también al medio ambiente, estableciendo las bases para un modelo económico sostenible.